La exposición “Un mantón, un baile, una fiesta”, celebrada en la Sala de Exposiciones José Pérezgil del 24 de abril al 18 de mayo, ha llegado a su fin con un extraordinario balance de 1.047 visitantes, consolidándose como uno de los eventos culturales más destacados de la temporada en Caudete.
Organizada por la Casa de Cultura, con la colaboración de la Cofradía de los Bailes del Niño y el Taller de Arte, esta exposición rindió homenaje a una de las prendas más emblemáticas del patrimonio textil y cultural: el mantón de Manila. La muestra no solo permitió contemplar la riqueza estética y artesanal de estas piezas, sino que también profundizó en su historia, evolución y simbolismo, especialmente en el contexto de los tradicionales Bailes de Navidad, donde los mantones cobran un protagonismo especial en la memoria colectiva local.
Uno de los grandes valores de esta exposición fue su planteamiento educativo y divulgativo. Los mantones se organizaron en una línea temporal histórica, permitiendo apreciar la evolución de estilos y técnicas a lo largo de los siglos. La clasificación incluyó mantones del periodo Imperio, isabelinos y tardíos, pasando por los años 1890–1930 —con ejemplos como los chinos, modernistas y cupleteros— hasta llegar a modelos más contemporáneos, siempre con atención a detalles como el bordado, el flecado y el uso simbólico.
Durante la inauguración, se destacó que el mantón de Manila es una prenda que, aunque originaria de China, fue adaptada para el mercado occidental y llegó a España tras un largo periplo a través del Galeón de Manila. En sus inicios, fue un artículo de lujo reservado a las élites, y con el tiempo se convirtió en una herencia familiar y un símbolo de identidad y elegancia.
La excelente acogida por parte del público, tanto local como foráneo, demuestra el gran interés por el patrimonio cultural inmaterial y la necesidad de seguir impulsando propuestas que rescaten y pongan en valor nuestras tradiciones. Esta exposición ha sido también un acto de comunidad, en el que muchas familias han colaborado aportando sus propios mantones, acompañando con historias personales a cada pieza expuesta.
Desde la Casa de Cultura, se agradece profundamente la implicación de todas las personas que han hecho posible esta exposición, reafirmando que el mantón no es solo una prenda, sino un símbolo de fiesta, memoria y transmisión generacional.
Last modified: 20 de mayo de 2025
